jueves, 10 de septiembre de 2015

Nosotros, la gente

La protesta


NOSOTROS, LA GENTE

Las fachadas de las calles de cualquier ciudad ofrecen bastante información, ya sea sobre la riqueza o no de sus materiales, o sobre el estado de las gentes que las habitan. A mí sobre todo me interesa este último aspecto, cómo se encuentran las personas que viven en las ciudades.

Este verano, paseando por una pequeña localidad de Portugal, la villa de Tomar, hice la fotografía que da pie a este artículo. En ella se ve una pintada que dice: “Tanta gente sin casa, tanta casa sin gente”. Liliana, la firmante de la pintada, hace una denuncia en toda regla. Como sabemos, Portugal es otro de los países de Sur de Europa a los que la troyka ha empobrecido con sus políticas de austeridad, que sirven para esquilmar grandes mayorías en beneficio de unos cuantos poderosos. Sus gentes, como las de Grecia y tantos otros lugares en Europa, como las nuestras, como muchos de nuestros vecinos y vecinas, como nosotros, la gente, sufren –sufrimos- una emergencia social y una devaluación vital que se grita de forma sorda estampando denuncias en las fachadas de las casas. El 4 de octubre los portugueses acuden a las urnas, tienen la oportunidad de transformar el clamor en acción política.

La ciudad de Madrid se llenó de palabras de denuncia en mayo de 2011. Gentes que surgieron de todos los rincones, salieron de detrás de los muros de las calles y ocuparon la Puerta del Sol durante varios días. Portaban pequeñas pancartas con sus reflexiones personales, eslóganes que una vez desarrollados en grupos de trabajo amplios dieron lugar a un proyecto de gobierno ciudadano. Unieron sus voces en un clamor contra un sistema económico antisocial, que no respeta la democracia, que crea desempleo, pobreza, desigualdad, graves carencias vitales, destruye derechos sociales que creíamos consolidados y aboca a una tristeza que empequeñece. Sus voces de protesta traspasaron nuestras propias fronteras.

La continuidad en la aplicación de dichas políticas por parte del Gobierno del PP han provocado que muchas personas perdieran su casa, se quedaran sin trabajo, sin poder estudiar o sin atención médica.

El grito de la Puerta del Sol de Madrid fue el inicio de un nuevo camino. Con el tiempo, personas que acudieron allí a protestar, decidieron dar el paso para elaborar una propuesta ciudadana que aglutinara a quienes querían un cambio en la ciudad de Madrid. Se consiguió tejer un movimiento de participación y de organización política amplio (en el que estaba Podemos, Ganemos, Equo, gentes de IU aglutinados en torno a Cambiar Madrid, Convocatoria por Madrid, gentes del movimiento asociativo vecinal, etc y muchas personas activistas sin partido ni organización concreta), que se conformó como el bloque Ahora Madrid, un espacio para la confluencia municipal en el que muchas y muchos de nosotros, la gente, nos implicamos para poner freno a esas políticas. Con diálogo, mucho trabajo y toneladas de ilusión hemos sido capaces de reconquistar el Ayuntamiento de Madrid y hemos conseguido que Manuela Carmena y los concejales de Ahora Madrid sean los representantes de las personas. En Madrid, y en otras ciudades en las que se conformaron candidaturas de confluencia para el cambio, que triunfaron, se consiguió que la protesta cristalizara en un movimiento amplio organizado. Eso dio sus frutos y ahora estamos en un peldaño más alto. La organización ha dado paso a la acción política. Ahora estamos en la fase de poner en práctica el programa con el que Ahora Madrid concurrió a las elecciones.

Los Ayuntamientos para el cambio que apuestan por políticas para el bien común, entre los que se encuentra el de Madrid, están dando lecciones de iniciativa política al Gobierno del Partido Popular, que no gobierna para las personas, para nosotros, la gente, sino para los prebostes que se reparten nuestra riqueza a través de los beneficios de las empresas del Ibex 35.

Estos Ayuntamientos se han puesto a trabajar para responder a los problemas diarios de las personas. Están proporcionando soluciones reales a las situaciones de emergencia social de las gentes que se han quedado sin casa o que están a punto de perderla. Desde los servicios sociales de estos Ayuntamientos se trabaja sin descanso para atajar situaciones de pobreza, de necesidad, de atención social que no se puede retrasar por más tiempo, porque hay familias en las que se pasa hambre, hay ancianas y ancianos que están solos, hay vecinos y vecinas que no tienen atención médica, porque este Gobierno de la derecha les expulsó del sistema porque venían de otro lugar.

Los Ayuntamientos de la gente le han dado otra lección más al Gobierno del Partido Popular. Esta vez ha sido una lección de solidaridad y de dignidad humana. Ante la emergencia de las personas que huyen de la guerra de Siria, y de tantos lugares de África, o de Oriente Próximo, que llaman desesperados a la puerta de esta isla denominada Europa estos municipios se están organizando para ofrecer su ayuda a los que vienen. Y lo más importante es que lo han hecho apoyados por nosotros, la gente. Porque muchos y muchas consideramos que cualquier persona, venga de donde venga, tiene derecho a techo, a escuela, sanidad, pan y libertad. Todos tenemos derecho a la cultura, a disfrutar de una vida digna. Tenemos derecho al pan y a las rosas, como reza uno de los eslóganes más bellos de la historia del movimiento obrero.

Es emocionante el momento histórico y político que estamos viviendo en España y en Europa. Las gentes estamos tomando conciencia de que tenemos que actuar para cambiar una realidad obstinada, que no quiere contar con la gran mayoría de las personas.

Lo que la historia ha demostrado es que cuando las personas cooperan y trabajan unidas en amplias mayorías para el bien común, las sociedades avanzan hacia lugares inclusivos en los que no se abandona a nadie. Otro Madrid es posible con la implicación de las gentes. Otro país es posible. Otra Europa es posible. Otro mundo es posible.

Nosotros, la gente, tenemos la fuerza que se necesita para cambiar las cosas. Hay que actuar. Hay que implicarse.

*Me pidieron un texto para el tercer boletín editado por Ahora Moratalaz, mi barrio, y me ha salido esto. Dejo el enlace del resto del boletín por si alguien quiere más información: http://us11.campaign-archive1.com/?u=118dfd2898140d10d25fb6e8c&id=58c3d82e88

Carmen Barrios