Ojos rasgados |
“Plantamos palabras vivas”, pero las quieren segar.
“Ni una palabra/brotará de mis labios/ que no sea/ verdad. / Ni
una sílaba/ que no sea/ necesaria. (…) Planté palabras vivas. / Ni una sola/
sometí… Estos versos de Blas de Otero encajan en lo
que durante casi veinte años ha estado haciendo la revista Temas para el debate, una
publicación mensual de pensamiento político en el ámbito de la izquierda en la
que se ha intentado siempre “plantar
palabras vivas, sin someterlas”, para contribuir
al necesario debate de las ideas abiertas.
El Partido
Popular quiere segar las palabras, terminar con el pensamiento crítico, como
demuestran sus pasos a medida que avanza la legislatura. La Secretaría de
Estado de Cultura, que dirige el señor Lassalle se ha convertido en un ariete
ideológico de la derecha más rancia. Además de todos los retrocesos que se
están produciendo en el ámbito de la Educación, el sector de la Cultura no deja
de sufrir agresiones y recortes presupuestarios siempre en la misma dirección,
la de silenciar la voz del pensamiento crítico.
La revista Temas
para el debate se acaba de
convertir en una nueva víctima de las políticas antidemiocráticas de dicho
ministerio: Temas ha sido totalmente excluida de las ayudas a la edición y
a las suscripciones que tenía desde 1996.
Un poco de
historia
En este punto es
necesario detenerse para hacer un poco de historia. Prácticamente durante todo
el ciclo de la Transición, el Ministerio de Cultura ha mantenido un programa de
ayudas a las revistas culturales y de pensamiento, sin tener en cuenta el
ámbito político al que pertenecieran ni su línea ideológica. Las ayudas se
concedían tras participar en un concurso público en el que un grupo de expertos
independientes y de prestigio nombrados por el Ministerio decidían a qué
publicaciones se le concedían en virtud de una serie de parámetros de calidad,
interés y relevancia. Temas optó con éxito a las ayudas
desde 1996, manteniéndolas sin problemas hasta el concurso de 2013, en el que
ha sido totalmente excluida de forma arbitraria y sin justificación alguna.
Ya el año pasado
sufrió un grave recorte en la ayuda (cercano al 30%). Pero, desde Temas
se encajó como razones presupuestarias debidas a la crisis. Pero lo que ha sucedido
en 2013, con su exclusión total de las ayudas, es una agresión que raya la
injusticia antidemocrática más flagrante. Y digo esto porque a la Revista Temas
se le ha retirado la ayuda
baremando con puntuación superior a algunas publicaciones que sí la han seguido
percibiendo.
A esto hay que
añadir una serie de irregularidades en todo en proceso de concurso que van
desde la propia composición del grupo de “expertos” -que han formado la
comisión de evaluación- hasta posibles errores detectados en la adjudicación de
los puntos que han hecho que Temas puntúe muy por debajo de lo
que debería, de acuerdo a los propios parámetros establecidos por el Ministerio.
Un hecho sin
precedentes
Pero hay un
hecho que es realmente grave. La revista Temas, con José Félix Tezanos como
Director de la publicación a la cabeza, se
ha dirigido al señor Lassalle, Secretario de Estado de Cultura, para intentar
recabar algunas informaciones necesarias que aclaren lo sucedido para poder
presentar un recurso o una reclamación a la que la publicación tiene derecho, y
se ha encontrado con un muro de negaciones. Desde la Secretaría de Estado se ha
informado a Temas de que no harán rectificaciones, “ni aunque hubieran
existido errores materiales o de cómputo” ya que la Comisión ha asignado todos
los fondos posibles en la convocatoria, sin que se haya guardado ningún
remanente -como es habitual en este tipo de concursos, precisamente por si hay
reclamaciones y se tienen que atender-.
Este hecho, conculca gravemente el derecho de los ciudadanos y/o las
entidades afectadas a poder ser atendidas en sus recursos. La negación a la
posibilidad de atender un recurso es un hecho sin precedentes, que causa total
indefensión ante posibles irregularidades en las que pueda incurrir una
Administración.
La actitud
cerrada y errónea de la Secretaría de Estado de Cultura lleva a pensar que ha
actuado así por motivos ideológicos, porque no tiene explicación que haya
habido errores de cómputo y que a pesar de tener puntuación superior a otras
publicaciones, a Temas se le nieguen.
Para más inri,
hay otro hecho que corrobora esta tesis: si se consultan los datos públicos
sobre las adjudicaciones de las ayudas de este año, es muy sospechoso que
además de Temas se hayan quedado sin ayuda publicaciones como “Gaceta
Sindical” (revista del sindicato CCOO), “El cronista del Estado Social y
Democrático de Derecho”, “Raíces” (revista de cultura judía), una revista
vinculada a SOS-Racismo, otra dedicada a la difusión de la cultura gitana, etc.
Es decir todo un repertorio que afecta a espacios sociales a los que la derecha
ultramontana, que parece dirigir el Ministerio de Educación, Cultura y
Deportes, parece querer callar también, en un ejercicio de terminar con lo
diferente, impidiendo la difusión de otras formas de pensamiento. Sin embargo,
sí se han mantenido a las ayudas a publicaciones con una línea ideológica
compatible con las expectativas de los dirigentes ministeriales actuales, como
son la “Revista de Occidente” con 19.901,35 euros (en la que el propio Secretario
de Estado señor Lassalle ha participado publicando artículos con asiduidad),
“Nueva Revista” con 10. 505,02 euros o “Cuadernos de Pensamiento Político” con
12.298,59 euros (publicación vincula a FAES).
La revista Temas
es una publicación con una trayectoria impecable en la defensa de la democracia
de calidad y participativa, de los valores de solidaridad, libertad e igualdad
que ayudan a avanzar a las sociedades. Su plataforma está abierta al debate de
las ideas críticas, que puedan arrojar luz sobre los problemas políticos,
sociales, económicos y culturales por los que atraviesa nuestro país. Una publicación así es
necesaria en tiempos como los actuales.
Temas es un huerto fértil para “plantar palabras vivas”. La Secretaría de Estado de Cultura niega el agua para regar el huerto al que esta publicación tiene derecho. Desde Temas existe la determinación de continuar “plantando palabras vivas”, porque es necesario conjurar la vuelta a esa España negra de los años cincuenta del siglo pasado en la que Blas de Otero escribió estos versos y que parece estar en el adn de algunos dirigentes del Partido Popular.
Temas es un huerto fértil para “plantar palabras vivas”. La Secretaría de Estado de Cultura niega el agua para regar el huerto al que esta publicación tiene derecho. Desde Temas existe la determinación de continuar “plantando palabras vivas”, porque es necesario conjurar la vuelta a esa España negra de los años cincuenta del siglo pasado en la que Blas de Otero escribió estos versos y que parece estar en el adn de algunos dirigentes del Partido Popular.
Carmen Barrios
Me solidarizo con Temas y contad con mi suscripción.Mi anterior comentario extenso no se si conseguí os llegara.Un fuerte abrazo para todo el equipo de Temas.
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